El imperio portugués y las raíces profundas de Goa*

[The Portuguese Empire and the Deep Roots of Goan Society]

Manuel Bastias Saavedra Leibniz Universität Hannover manuel.bastias@hist.uni-hannover.de

La historia de los imperios se ha convertido en un importante campo de investigación en las últimas décadas, especialmente por su centralidad en los campos de la historia global y atlántica, la historia del conocimiento, la historia medioambiental y en la historia global del derecho. El mundo contemporáneo está sin duda constituido por los casi cinco siglos de imperialismo europeo, pero una serie de perspectivas nuevas y críticas, incluidas las perspectivas poscoloniales, subalternas y decoloniales, así como los enfoques microhistóricos, están reevaluando la experiencia imperial, oponiéndose a las tradicionales narrativas orientalistas y centradas en Europa. Son precisamente estos discursos los que están en el centro del libro Religion and Empire in Portuguese India de Ângela Barreto Xavier, el cual es una versión reducida y adaptada de su libro de 2008, A Invenção de Goa. El libro comienza presentando los escritos de António João Frias, párroco en Goa y súbdito indio de la Corona portuguesa, para mostrar cómo las poblaciones colonizadas se apropiaron y reforzaron los discursos coloniales e interiorizaron la idea de Occidente como »agente liberador y racionalizador en otras geografías« (1). Por desgracia, estos estereotipos no sólo reflejan los discursos coloniales del siglo XVII, sino que siguen siendo comunes en la investigación histórica, que frecuentemente entiende Europa como el principal agente en la difusión de la civilización y la modernidad. |

Xavier no reproduce estas narrativas, sino que utiliza su aparición en el contexto histórico de la Goa portuguesa para señalar las tensiones inherentes al colonialismo y al proyecto imperial. Por un lado, sostiene que la interiorización de estas ideas por sujetos como Frías revela el éxito del proyecto imperial; por otro, la presencia de »tipos sociales« como Frías demuestra que la perdurabilidad de la presencia imperial portuguesa en Goa dependía precisamente de personas como él: poblaciones locales que consintieron e hicieron suya la causa imperial. La conversión fue crucial para lograr esta transformación. Pero, como sostiene Xavier, no fue tanto la conversión religiosa como la cultural que acompañó a la cristianización de los habitantes de Goa y las Antiguas Conquistas – »la transformación gradual de las formas de pensar, hacer y ser, y de concebir el tiempo y el espacio y el presente y el pasado en el marco del cristianismo« (9) – lo que explica la persistencia del dominio imperial portugués. El poder militar portugués por sí solo no habría logrado mantener el control sin la »colonización de la imaginación« o la »colonización de la conciencia«.

La tensión entre colonización e interiorización se desarrolla a lo largo de siete capítulos. Los capítulos 1 y 2 sientan las bases del diseño imperial y las estrategias de conversión. El capítulo 1 gira en torno a la cuestión de la confesionalización como parte del diseño intencional del rey Dom João III orientado hacia la centralización y la cohesión de la monarquía mediante la creación de poblaciones religiosamente homogéneas tanto en la metrópoli como en los territorios del imperio. Fue en este contexto en el que Goa se convirtió en la capital del Estado da Índia, un cambio de estatus que la vio convertirse en un centro imperial dotado de instituciones y privilegios reales. El capítulo 2 se centra en la conversión y en el marco institucional que apoyó los intentos de aplicar los planes de homogeneización cultural y religiosa de la Corona portuguesa en Goa. El capítulo detalla la estructura organizativa de la Iglesia, las diferentes ideologías seguidas por las órdenes (especialmente franciscanos y jesuitas), las políticas para destruir los templos e ídolos locales y borrar todos los marcadores visibles de las religiones no-cristianas, y los incentivos legales y sociales que se movilizaron para fomentar la conversión.

Mientras que, en cierto sentido, los dos primeros capítulos contemplan Goa desde las intenciones y los objetivos de las autoridades políticas y religiosas portuguesas, los capítulos siguientes se sumergen de lleno en los territorios de Goa. Aquí Xavier demuestra su impresionante dominio de las fuentes primarias y su atención al detalle. Los capítulos 3 y 4 revelan la importancia estructural de la alianza establecida entre la Corona portuguesa y la Iglesia, que permitió al imperio utilizar las redes eclesiásticas y monásticas para extender su alcance a lugares remotos. Estos capítulos muestran cómo el imperio echó raíces no sólo en la Goa urbana, sino también en lo más profundo de la Goa rural. En el capítulo 3 se analiza cómo el clero regular y secular se trasladó a las aldeas, fue dotado de poder jurisdiccional y pudo acumular poder económico mediante el control de tierras y aldeas. La presencia de los sacerdotes y las redes que establecieron no sólo resultaron eficaces para convertir a las poblaciones locales al cristianismo, sino que también trastocaron »las concepciones y percepciones del tiempo y el espacio, así como la forma en que estos sujetos se percibían a sí mismos, a su familia y a la sociedad« (135). La conversión de padres, hijos mayores, esposas e hijas trastocó casas y familias, interfiriendo »en la transmisión de la tierra y la herencia, cambiando las pautas de organización y jerarquía en dichas familias« (145). Con la conversión de los gaunkares, las élites locales de las aldeas, el tiempo religioso y las rutinas diarias se cristianizaron. Por ejemplo, el calendario cristiano se ajustó al calendario devocional precristiano, y las campanas de las iglesias empezaron a marcar la actividad diaria y a alterar las rutinas laborales. Aunque estos actos cambiaron el paisaje religioso del campo goes, el capítulo 4 se enfoca en »las herramientas de cristianización« orientadas a la internalización de la religión. Instrumentos religiosos, tales como »la prédica, confesión y comunión, además de escuelas para huérfanos, niños pequeños e instrucción para adultos« (155), así como el establecimiento de instituciones caritativas, cofradías y hospitales en las aldeas sirvieron como poderosas herramientas para moldear »la memoria, el entendimiento y la voluntad« (153).

Los capítulos 5, 6 y 7 cambian la perspectiva para revelar las profundas raíces de las comunidades de Goa. El relato es complejo y pretende mostrar la diversidad de las experiencias históricas sociales y religiosas locales, y cómo éstas moldearon la conversión. El capítulo 5 comienza con un análisis de los panteones de Chorão y Caraim para ilustrar »la complejidad religiosa de la isla y sus intersecciones con el poder, el uso de la tierra y los |grupos sociales que constituían la localidad« (213). Al destacar la diversidad de las experiencias históricas de la aldea, reconstruidas a través del culto a las divinidades locales (teniendo cada aldea panteones diversos), Xavier argumenta que la cristianización debe relativizarse dado que la concepción religiosa local podía integrar el cristianismo como una divinidad más dentro de un esquema de creencias que era integrativo, cumulativo y flexible. El cristianismo se convirtió así en una pieza más del mosaico ritual y religioso local que permitió su integración, aunque la atribución de significados y funciones probablemente difiriera entre los misioneros y las poblaciones locales.

El capítulo 6 gira alrededor de la resistencia de las poblaciones locales a la cristianización. Una vez más, la diversidad de las aldeas se pone de manifiesto, ya que el episodio central del capítulo está tomado de Cuncolim, una aldea alejada de la ciudad de Goa y situada en la frontera con el sultanato de Bijapur. El contraste entre el consentimiento mayoritariamente pacífico de Chorão y la resistencia de Cuncolim permite a Xavier nuevamente destacar la diversidad de las aldeas y el desarrollo de la experiencia imperial. Hubo, en definitiva, un patrón geográfico de resistencia contra los portugueses, siendo más común en Bardez y Salcete, que estaban situadas más cerca de Bijapur: »La cristianización del imaginario no sustituyó en muchos de estos pueblos la memoria colectiva del pasado. Permanecieron vivamente en contra de los portugueses« (275). Por último, el capítulo 7 se enfoca en la construcción de narrativas históricas por parte de las élites locales de Goa. La Corona mantuvo las diferencias entre los grupos sociales de Goa e incrementó la diferencia entre los portugueses peninsulares y goeses. Era una forma de asegurarse de que ninguno de los grupos acumulara un poder excesivo. Mientras los casados portugueses, colonos casados con mujeres locales y sus descendientes, intentaban demostrar su »antigua nobleza« para asegurar sus posiciones sociales, las élites locales apelaban a su propia condición de nobleza india para asegurar cargos de gobierno local para sus grupos. Xavier se centra en dos tratados para ilustrar cómo brahmanes y chardos adoptaron »el lenguaje imperial, adhiriéndose a los debates sobre la nobleza de las armas frente a la nobleza de las letras, de la nobleza cristiana frente a la nobleza civil, del linaje frente al hogar« (310). Los autores utilizaron esta gramática de la nobleza portuguesa para replantear la historia local dentro de los relatos bíblicos y cristianos. La interiorización de las narrativas cristianas y occidentales demuestra, según Xavier, hasta qué punto las élites locales se adhirieron y sostuvieron el orden imperial portugués, marcando la importancia que tuvo la dimensión confesional para sostener el dominio portugués en Goa.

En última instancia, Religion and Empire in Portuguese India trata menos sobre el imperio y la conversión como de la experiencia local del imperio y sus complejidades. Xavier no sólo se opone a las representaciones orientalistas de Goa y la India, sino que también muestra cómo la maquinaria del imperio era compleja, tenía múltiples niveles y estaba plagada de conflictos internos. Pero el corazón del relato está puesto en la sociedad de Goa, vista en toda su complejidad, atando los cabos entre pasado y presente, mundo urbano y rural, y dando protagonismo a las identidades grupales y las desigualdades sociales. Al mostrar las profundas raíces religiosas, sociales, y culturales de la sociedad goesa, Religion and Empire in Portuguese India muestra que la experiencia imperial fue necesariamente un proceso de traducción de la gramática cristiana y occidental a las condiciones locales. Es un libro importante para quienes se interesan por la relación entre imperio y derecho, pues muestra que a pesar de que la monarquía intenta ordenar e integrar poblaciones locales, éstas utilizan, reinterpretan e integran los códigos culturales de los colonizadores, atendiendo a las largas y ricas tradiciones históricas del lugar.

Notes

* Ângela Barreto Xavier, Religion and Empire in Portuguese India. Conversion, Resistance, and the Making of Goa, Albany (NY): State University of New York Press 2022, XVIII + 407 p., ISBN 978-1-4384-8911-7